NEZAHUALCÓYOTL, Méx.- 23 DE FEBRERO DE 2016.- Personal médico del hospital Gustavo Baz Prada del gobierno del Estado de México que se negaba a dar atención a un hombre agonizante en situación de calle,  cambió abruptamente su postura al descubrir que llevaba 21 mil pesos en efectivo entre sus ropas.

El pasado lunes 22 de febrero, alrededor de las 16:00 horas, rescatistas municipales  a bordo de una ambulancia trasladaron a dicho hospital a un paciente, pero al salir se percataron de la presencia de una persona mayor, aparentemente en situación de calle, quien estaba tirado inconsciente en la entrada del hospital sobre la avenida Prolongación López Mateos, mismo que se encontraba en fase agónica, por lo que inmediatamente lo ingresaron al hospital para que fuera atendido.

Al notar lo ocurrido, personal médico del lugar externó su molestia  alegando que no tenían que haberlo metido y que los paramédicos se hicieran cargo de él; asimismo señalaron su rotunda negativa a atenderlo debido a su aspecto y estado clínico.

Después de varios minutos de insistencia, el personal paramédico que pretendía auxiliar al señor, recibió una y otra vez las mismas respuestas y reproches.

Al revisar al hombre, quien posteriormente fue identificado como Francisco Padrón Salazar, de 67 años de edad, encontraron que tenía entre sus ropas la cantidad de 21,000 pesos en efectivo; momento en el que inmediatamente fue ingresado al hospital, asignándole rápidamente una cama.

Afirmaron los paramédicos que después del repentino cambio de parecer de los encargados del hospital, el adulto fue ingresado y el dinero, el cual llevaba en una vieja cartera junto con una credencial, gracias a la cual fue identificado, fue tomado por aquellos que minutos antes le negaban atención médica.

A decir de los denunciantes, una doctora de urgencias, quien no quiso dar su nombre,  fue la responsable de lo ocurrido en el Gustavo Baz la tarde del pasado lunes.

Los rescatistas lamentaron la mala atención que se brinda en los hospitales del sector salud mexiquense y pidieron que se dé seguimiento al destino del dinero propiedad del señor Francisco, a quien esperan se atienda como merece cualquier persona, independientemente de su aspecto, situación social o médica.