Afirmó que las nuevas generaciones ya no aprecian su trabajo.

AMECAMECA, Méx.- 6 DE MARZO DE 2017.-  Domingo  Hernández Soto conserva una tradición milenaria en su familia y acude año con año al tradicional carnaval de Amecameca vendiendo sus canastos y tapetes que ofrece al pie del cerro del Sacromonte.

Originario de San Juan Atzompa, en el estado de Puebla, don Domingo Hernández Soto acude año con año al tradicional carnaval que se celebra en el municipio de Amecameca donde vende y exhibe los chiquigüites, canastos y petates que fabrica junto con su familia con petate y carrizo que con sus manos cortan a la orilla del rio.

“Salimos temprano al campo y buscamos de las mejores varas para trabajar, las cortamos amarramos y las llevamos a la casa para sumergirlas en agua y se pueda trabajar en la fabricación de los canastos”, comentó.

Tres generaciones de su familia se han dedicado a la venta de petates y canastos, los cuales han comercializado en las fiestas tradicionales como los son los carnavales, tal es el caso de Amecameca, donde desde hace más de 40 años acuden a las faldas del cerro del Sacromente.

“Recuerdo que cuando era pequeño y mi padre me traía a vender, aún estaba la estación de tren atrás de la presidencia y me gustaba ir a ver cuando llegaba”, recordó el señor Domingo al preguntarle qué diferencia hay entre el carnaval de hace 40 años y el actual.

La entrada al mercado de cosas chinas y fayuca, ha hecho que personas como el Señor Domingo cada vez vendan menos e incluso dejen de trabajar en la artesanía, ya que las nuevas generaciones no le toman la importancia o simplemente muchas de ellas ya no se usan.