A Mari José la asesinó su ex novio hace 8 años, hoy su madre llena de dolor recuerda su anivesario luctuoso
La tristeza invade a una madre, al recordar que hace 8 años su hija Mari José, fue asesinada por su ex pareja, en el municipio de Nicolás Romero, feminicida que fue condenado, por el artero crimen.
Mari José, tenia 16 años , era una jovencita alegre, que amaba el fútbol, por lo que era aficionada de equipo del Cruz Azul, comentó su madre, que al recordar su muerte se desmorona.
Comentó que le encantaba cuidar a los animales y anhelaba continuar con sus estudios hasta convertirse en médico forense, sueños que le fueron truncados a su hija que fue localizada sin vida el 19 de mayo del año 2014.
Día que cambió su vida, al saber que Nereo Rodríguez Hernández la ex pareja de su hija le disparó y mató a Mari José, quien posteriormente enterró su cuerpo e intentó quemarlo, con el fin de no dejar huellas en la comunidad de San José del Vidrio conocida como las Estacas o Cansa Caballos en Nicolás Romero.
El cuerpo sin vida de Marijo como la llamaban de cariño, fue localizado tres días después de haber sido reportada como desaparecida, hallazgo que destrozó a su madre María Eugenia.
Tras el hallazgo del cuerpo, el feminicida Nereo Rodríguez Hernández, intentó huir, sin embargo fue detenido, con el arma con la que le había quitado la vida a Mari José, la jovencita de 16 años que tenía tres meses de embarazo, bebé procreado con una nueva relación sentimental que tenía Marijo.
Maria Eugenia, recordó que su hija se había mudado a vivir con su padre, luego de que había terminado su relación sentimental con Nereo, el hombre con el que sufría violencia intrafamiliar.
Inclusive denunció, luego de que Nereo la agredió físicamente, al saber que Mari José ya tenía una nueva relación.
La angustia para su madre llegó el 16 de Mayo del 2014, día que Mari José, ya no regresó a la casa de su padre y fue reportada como desaparecida.
Ese día, comenzaron la búsqueda, en la colonia donde vivía con su padre y en el municipio donde vivía su madre, sin tener éxito.
Tres días después de su desaparición, Marijo, fue localizado sin vida enterrada en el monte de la comunidad en mención líneas arriba.
Su madre, soltó en llanto, no podía creer que la menor de sus dos hijas, la jovencita que le demostraba su amor día con día, su niña que la acompañaba a todos lados, hubiera sido asesinada, por el sujeto que decía amarla.
El dolor de su alma, dio sepultura a su hija, que anhelaba la llegada de su bebé, amaba la música de banda y le encantaban los tacos y las hamburguesas.
Un año después Nereo el feminicida, preso en el penal de Barrientos fue sentenciado a 64 y seis meses de prisión, condena con la que no paga el daño que le causó.
«Me quitaron una parte de mi, los recuerdos no aminoran tanta tristeza, entró en depresión, me siento agotada mental y físicamente, muchas veces me derrumbó con facilidad, aunque trató de vivir no hay vida», precisó su madre al recordar que ya son ocho años que le arrebataron la vida a su hija Mari José, la jovencita que nunca dejo de demostrarle su amor y a la que le truncaron sus sueños de una manera tan cruel.