A Alfonso lo encontraron sin vida junto a un montículo de arena en un terreno en obra, presentaba lesiones producidas por golpes en el rostro, en el poblado de Calixtlahuaca, límites con San Marcos Yachihuacaltepec, en Toluca.
Apenas amanecía el jueves cuando los vecinos se percataron que el hombre de 56 años, que vestía chamarra, playera y pants en azul, así como tenis vino, se encontraba tirado e inconsciente bocarriba, con sangre en la boca.
Enseguida solicitaron una ambulancia; sin embargo, cuando los paramédicos del Servicio de Urgencias del Estado de México arribaron, únicamente confirmaron que la persona del sexo masculino ya había muerto.
A la calle Centenario entre Revolución y 18 de Octubre, llegaron policías municipales quienes colocaron sus patrullas para evitar que la gente observara el cadáver de la víctima; los familiares acudieron para identificarlo.
La carpeta de investigación iniciada por la Fiscalía General de Justicia mexiquense se inició por el delito de homicidio debido a las heridas que presentaba para tratar de dar con el responsable y determinar el móvil del crimen.
