«Prefiero pedir unas monedas que robar», dijo Nadia Karina quien a falta de un empleo fijo en esta pandemia, se dedica a pintar los topes  de concreto en  diferentes vialidades  para ganarse unos pesos honradamente.

Bajo los rayos del sol, Nadia Karina Jiménez, se planta sobre avenida Pichardo Pagaza para realizar su trabajo del día: pintar los topes de concreto, con el objetivo de ayudar a los automovilistas a visualizarlos mejor.

Nadia Karina, vecina de la colonia Central Michoacana, dio conocer que durante esta contingencia que se vive por el Covid-19, se le ha complicado encontrar empleo, por lo que se ha dedicado a efectuar esa labor para pedir a los conductores una cooperación voluntaria y poder subsistir.

La mujer de 40 años, expresó que debido a que solo cuenta con estudios de secundaria y por su edad se le ha complicado encontrar un empleo fijo.

«Hace tiempo estaba vendiendo congeladas de la Bona Ice, pero con la contingencia las ventas bajaron y solo ganaba 30 pesos diarios por varias horas de trabajo y  tras recorrer  muchas colonias, por lo que no me alcanzaba para subsistir y menos para pagar mi renta » refirió.

Recalcó que también se dedica a realizar quehaceres domésticos en casas, sin embargo a consecuencia de la pandemia tampoco le ha salido chamba.

«Ya en los empleos te piden estudios y que sean menores de 35 años y así es difícil encontrar un trabajo fijo y con prestaciones» preciso.

Por lo que decidió comprar botecitos de pintura amarilla y negra y pintar los topes y así  después pedir unas monedas y sacar, aseguró, por lo menos para sobrevivir en esta crisis.

Nadia indicó que no tiene hijos,  pero tiene que trabajar para ayudarle a su esposo que, como vendedor de bebidas embotelladas en los semáforos, también ahora por esta contingencia gana muy poco  dinero y juntos se apoyan para poder sacar para sus alimentos y el pago mensual de  la renta.

«Yo prefiero pedir unas monedas que ponerme a robar, porque a mí no me enseñaron a delinquir y prefiero ganarme el dinero honradamente, aunque solo sean 20 pesos diarios,  pero jamás dinero malhabido» relató.

Comentó que para poder sacar un poco de dinero permanece más de 5 horas parada en la carretera sin importarle las inclemencias del tiempo o la insolación que sienta.

Finalmente señaló que en ocasiones siente  ansiedad, nervios e incluso padece de insomnio, pero a pesar  de la crisis que viven por la pandemia dijo que tiene que echarle ganas y salir a ganarse la vida honradamente como lo es pintando los señalamientos viales de los topes a cambio de unas monedas.