Un productor de video que está iniciando su carrera, puede pensar que para evolucionar y dar un paso hacia un camino más profesional seguramente necesita adquirir una cámara profesional, pero quienes ya tienen años estudiando sobre el área, saben que la calidad de los videos comienza desde un gran detalle: el sonido.

Este aspecto tan importante es probablemente lo que más fácilmente puede dar vida o arruinar un video. El sonido es una ciencia aparte, va desde la elección y el manejo del equipo hasta el tratamiento correcto en el arte de la edición.

Continúa la lectura para conocer la importancia del cuidado del sonido y cómo editarlo de manera profesional.

Por qué es importante elegir y probar bien los micrófonos

Micrófonos en plural, porque uno solo no es suficiente, incluso cuando la grabación aparentemente solo requiere uno.

Durante las grabaciones, es bastante habitual que alguien observe la cámara y vea lo que se graba desde la pantalla, y después de la grabación, siempre hay una supervisión a más para ver si todo está bien. Ese mismo cuidado debe tenerse con el audio.

La cuestión aquí es que el sonido es mucho más difícil de controlar; puede ocurrir que el cable del micrófono tenga un mal contacto o que el micrófono golpee algo y haga ruido, es por eso que te recomendamos hacer pruebas y verificar que el sonido está funcionando perfectamente durante la grabación, de esta forma te evitas un doble trabajo al momento de editar.

Te recomendamos también disponer de 2 canales de grabación, uno principal y otro de reserva, es una garantía que puede marcar la diferencia.

Conoce un poco el equipo

• Micrófonos direccionales: Se acoplan a las cámaras, y graban el sonido desde ellas, eliminando el trabajo de sincronizar el audio con el video durante la edición. Graban en la dirección a la que apuntan. Son prácticos, pero tienen la limitación de no poder captar sonidos desde lejos.
• Micrófonos de pluma: Graban en área, captando lo que está cerca de ellos. Son las que se utilizan a menudo en el cine, que se mantienen encima de los actores. Deben estar sujetas a un soporte y alguien debe sostenerlo, y también deben estar conectadas a una grabadora de voz.
• Micrófonos de solapa: Aquellos que comúnmente usan los periodistas y van sujetados en la ropa. Se conectan a una grabadora de voz y tienen opciones con cable o inalámbricas. Algunas veces puede dar problemas de ruidos molestos cuando se esconden en la ropa, para evitar esto, recomendamos usar los inalámbricos para que alguien pueda escuchar en tiempo real la grabadora y verificar cualquier problema.
• Grabadora de voz: Ya sea con ella a la vista (si no tienes problema) o con ella escondida en la escena; es una gran opción para grabar como canal de reserva.

Edición: Sincronización del audio con el video

Este paso es fundamental, y para ello necesitarás de un movie maker online. Hay varios en el mercado, tanto para principiantes como para profesionales, cada uno con sus propias características y costo. Ten en cuenta que la manipulación libre de pistas de audio y video es un recurso que no está presente en cualquier programa de edición, sobre todo en los más básicos, así que asegúrate de que el programa de edición que has elegido disponga de esta herramienta.

Con el programa abierto, coloca un archivo de video y su correspondiente archivo de audio en pistas separadas, uno encima del otro. El programa mostrará dibujos en formas de onda que te ayudarán a sincronizar, luego arrastra los archivos hasta que estén sincronizados. Escucha si el audio de la cámara y el del micrófono están alineados; si todo está bien, puedes eliminar el audio de la cámara, que ya ha cumplido su función de servir de referencia. A veces es necesario pulsar un botón para separar el video y el audio de la cámara en dos archivos distintos.

Cada software tiene una forma diferente de ser utilizado, el aprendizaje requiere tiempo y práctica. Siempre que tengas dudas sobre cómo hacer algo, investiga. La lógica entre los programas es similar, pero los comandos cambian.

Foleys: un arte sutil

Los efectos de sala (Foleys) son efectos sonoros artificiales que se colocan para hacer más refinada la escena. Los micrófonos, sobre todo los profesionales, están muy centrados en captar la voz, y por ello excluyen otros sonidos, que a veces se pierden. Por ejemplo: sonido de pasos, una puerta que se cierra, un vaso que se llena de bebida o gente que habla de fondo. Estos sonidos pueden aportar mucho a la escena, pero deben estar bien elegidos y tratados con sutileza; la idea es que, en la medida de lo posible, no se note que son falsos. Hay sitios web con muchos sonidos disponibles para descargar y también es posible grabar tus propios sonidos.

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