Construyen albercas de $100 millones en Metepec para concesionarlas a particulares

las nuevas instalaciones deportivas de Metepec se construyen con recursos publicos.

METEPEC, Méx.- 01 DE SEPTIEMBRE DE 2014.- El pasado mes de julio, el Congreso del estado autorizó al municipio de Metepec desincorporar y enajenar en subasta pública siete inmuebles localizados en diversos puntos del municipio y otorgar en comodato por 20 años dos unidades deportivas a un ente público o privado.

Los espacios deportivos se construyen actualmente con recursos públicos.

La primera de estas estará ubicada en las calles Josefa Ortiz de Domínguez #1480 en el poblado de  San Bartolomé Tlaltelulco, la cual tiene una superficie de terreno de doce mil trecientos cuarenta y tres metros cuadrados.

El segundo inmueble se ubica sobre la avenida Adolfo López Mateos # 600 norte, en el parque San José “La Pilita”, colonia La Pila, con una dimensión de once mil 472 metros cuadrados. Ambos espacios contarán con albercas.

Tanto el parque de La Pila como el de la comunidad de San Bartolomé Tlaltelulco tienen años de funcionamiento, pero actualmente se construyen dentro de ellos dos multideportivos con alberca semiolímpica, tinas de hidromasaje y canchas para diversas disciplinas.

Para su construcción se invirtieron más de 100 millones de pesos de dinero público, pero ambos serán cedidos a la iniciativa privada para su operación. Bajo este esquema, la población tendrá que pagar una cuota para utilizar los multideportivos, mientras que el resto del parque seguirá siendo gratuito.

Será durante los próximos días cuando se habrá el proceso de licitación para que los particulares compitan y se determine quién manejará las instalaciones por las próximas dos décadas.

En este sentido, el diputado Norberto Morales Poblete aseguró que el argumento presentado por el ayuntamiento sobre que los recursos que se obtengan por la concesión serán invertidos en materia de seguridad pública, no justifica el hecho de vender los inmuebles.

Abundó que el municipio invertirá 110 millones de pesos en la construcción y ahora dice no tener la capacidad para mantenerlo, “es una aberración, ni siquiera te estás dando a la tarea de ver si eres capaz de operarlas, es una situación contradictoria, para qué te compras un Ferrari si no sabes manejar”.

Añadió que los ayuntamientos no deben construir para que particulares obtengan beneficios, y señaló que lo más probable es que será un “mega negocio” para particulares como Nelson Vargas.

Bajo este mismo tenor se pronunció el coordinador de los diputados del Partido del Trabajo, Oscar González Yáñez, quien dijo la excusa de emplear el dinero recaudado en seguridad, no es válida si en cinco años de administración priista de Herrera Anzaldo y Carolina Monroy no se ha comprado una sola patrulla.

 Por su parte, el diputado perredista, Octavio Martínez Vargas, aseguró que bajo la excusa de prestar un mejor servicio se ha determinado privatizar un bien público, cuando en realidad lo único que se busca es obtener ganancias, “lo que se está haciendo es lucrar con un bien público”.

Señaló que lo grave es que, “con bienes y recursos públicos se pretende hacer negocios de particulares”, por ello, sostuvo, es necesario la creación de una comisión que dé seguimiento al proceso de quienes participarán y la utilización de los recursos que se obtendrán.

Por su parte, habitantes de la colonia La Pila ven con desagrado la medida, ya que  tendrán que pagar para utilizar los espacios deportivos, “nos dijeron que iban a ser públicos y ahora serán privados”, indicó una madre de familia.

Insistió con enojo que solo las personas que tengan la capacidad de poder pagar una cuota de recuperación podrán hacer uso de ellas.

A decir del área de comunicación social del ayuntamiento, la cuota servirá para darle mantenimiento al espacio, además, de pagarles a los instructores por los servicios que se ofertarán.

Asimismo, el ayuntamiento informó que se invirtieron  100 millones de pesos para ambas obras con recursos federales y que deberán quedar concluidas a más tardar a finales de septiembre, para que de forma inmediata entren en operación.