ECATEPEC, Méx.- «Mi hijo fue plagiado, está desaparecído y es injusto que  uno de los  secuestradores quedará libre en un año  por ser menor de edad», dijo Verónica, madre de Diego Maximiliano, al realizar un memorial en su honor a días de cumplirse  4 años que fue plagiado.

Verónica, quien realizó una misa, así como una ceremonia para recordar a Diego Maximiliano Rosas Valenzuela, quien fue secuestrado el 4 de septiembre del año 2015, después de salir de su domicilio en la colonia Llano de los Báez, rumbo a Las Américas, a verse con unos amigos.

Ese día comenzó su calvario lleno de dolor, al recibir la llamada de los secuestradores que pedían un rescate por entregar a Diego, de tan solo 16 años, y único hijo.

La angustia y sufrimiento invadió su hogar al negociar con los plagiarios que pedían una cuantiosa suma de dinero, que no lograron juntar.

Sin embargo, como se recordará,  recabaron una parte de dinero, los secuestradores aceptaron y a cambio entregarían a Diego.

Tras realizar el pago del secuestro, los plagiarios engañaron a la familia, porque Diego nunca apareció en el lugar donde les indicaron que lo dejarían, lo que causó un gran dolor para su madre, que fue engañada.

Por lo que Verónica comenzó una lucha en búsqueda de su hijo y logró, con el paso del tiempo, que tres de los secuestradores, entre ellos un menor de edad, fueron detenidos.

La pesadilla no paró, porque dos de los detenidos señalados de ser partícipes  en el secuestro están en  proceso de recibir sentencia, mientras el tercero, por ser menor de edad, primero recibió una sentencia de 3 años 6 meses, que tras realizar una apelación un juez la aumento a 4 años con dos meses.

Verónica, que ha recorrido 10 estados de la República Mexicana en busca de Diego, sin tener éxito, esta indignada al saber que el plagiario que recibió sentencia solo le falta un año para quedar libre y sin antecedentes penales.

Esto, recalcó, mientras su hijo sigue desaparecido, porque los presos que cuentan con buenos abogados para su defensa, no han dicho dónde está Diego.

Vero, que aseguró que por su intuición de madre presiente que está vivo, no ha dejado pasar ni un día sin seguir su búsqueda y explicó que aparte  de recorrer Semefos ahora también se ha enfocado en visitar hospitales psiquiátricos, con la esperanza de encontrarlo.

«Yo como muchas madres no podemos quedarnos sentadas a llorar por nuestros hijos que están desaparecidos, tomamos decisiones y nos dedicamos hacer los trabajos de búsqueda con un dolor latente que continúa al no saber qué pasó con nuestros hijos», refirió.

Indicó que es urgente que las autoridades modifiquen las leyes, en las que se busca que los menores de edad, que cometan delitos graves, sean sentenciados como adultos.

«Lo digo porque no es justo que uno de los secuestradores de mi hijo, que sigue desaparecido, saldrá en un año y absuelto sin antecedentes, y con esto para mí no se hace justicia, porque yo lo que quiero es que me devuelvan a Diego», reiteró.

Además exhortó a las autoridades para que a ella, así como a muchas familias, las sigan apoyando en la búsqueda de sus seres queridos desaparecidos, e hizo  hincapié en que ella con sus pocas herramientas no ha dejado ni parará de buscar a su hijo, joven que estudiaba la preparatoria y era un hombre de bien.

«Es un dolor latente que tengo, pero yo lo siento vivo, agarró fuerzas para seguir, porque necesito saber qué pasó con mi hijo, por eso quiero recordarlo con homenajes, marchas, memoriales para que las autoridades no se olviden que Diego fue secuestrado y está desaparecido desde hace 4 años y busco justicia y que me devuelvan a Diego», finalizó.