Delicada de salud e internada en un hospital de la CDMX se encuentra Angélica quien ha sufrido por más de 2 años buscando a su hija que desapareció al salir de trabajar en la colonia San Mateo Cuautepec, municipio de Tultitlán y a quien anhela encontrar.

Angélica Cervantes Aguilar ha vivido una pesadilla y dolor desde que su hija Lizbeth Hernández desapareció el 16 de junio de año 2018 después de salir de su trabajo en Tultitlán para dirigirse a su domicilio en el municipio de Tecámac.

Domicilio de su madre en Lomas de Tecámac donde Lizbeth vivía con su hija que actualmente tiene 7 años, desde hace ocho meses tras haberse separado de su pareja y al que ya no llegó.

Día que cambio la vida de Angélica quien tiene otro hijo menor y quien también es madre soltera y comenzó la búsqueda de su hija que tras investigar en la empresa de Telemarketing en Tultitlán donde tenía solo mes y medio laborando, donde  de acuerdo a versiones de compañeros, se acompañaron hasta la avenida José Lopez Portillo, donde cada quien tomó rumbos distintos.

Sin embargo, nadie se percató que abordó el autobús de la Línea 2 del Mexibús, ruta de transporte que tomaba para trasladarse a su casa.

La preocupación aumentó al continuar la búsqueda entre amigos, familiares y con su ex pareja que tampoco tenían noticias de su paradero.

Comenzó el calvario para Angélica cuyas autoridades la hicieron perder tres días para poder iniciar la denuncia de la desaparición.

Esto porque al presentarse al Centro de Justicia de San Cristóbal en Ecatepec, se negaron a iniciar la carpeta con el argumento de que no había desaparecido en la localidad y la enviaron a Tultitlán.

Ministerio Público donde tampoco fue atendida y la enviaron a Tecámac con la justificación de que era residente de ese municipio, sin embargo ahí de igual manera se negaron atenderla y la enviaron a la Fiscalía de San Agustín, donde por fin se inició la denuncia por desaparición que quedó registrada en la carpeta de investigación NUC: ECA/ECA/ECA/034/125052/18/06.

Como consecuencia del retraso de la averiguación, cuando las  autoridades trataron de verificar las cámaras de seguridad de los lugares donde posiblemente camino, ya se habían borrado.

Durante la búsqueda en hospitales,  Semefos, centros penitenciarios, clínicas psiquiátricas y recorridos que realizó en varios municipios y en algunos estados ante la desesperación de no encontrar a su hija, comenzó a presentar problemas de salud que provocó parara la búsqueda por unas semanas.

Sin embargo, no se dejó vencer y continuó con su lucha de búsqueda de su hija que actualmente tiene 28 años y quién tenía varios sueños por cumplir, entre ellos fincar su propio departamento para vivir con su nieta.

Aunque las autoridades le mostraron apoyo en un inicio, con el paso del tiempo no presentaban avances en la investigación y se olvidaron del caso.

Esto no detuvo a Angélica que aunque en ocasiones se sentía mal debido al sufrimiento y angustia de no saber nada de su hija, volvía a levantarse a seguir con búsqueda y pedir a quienes se la llevaron la dejen regresar a casa.

Sin embargo, el dolor, tristeza y desesperación aumentaron y desde el pasado viernes  Angélica quien anhela encontrar y ver a su hija, empezó nuevamente a tener graves  complicaciones de salud por lo que tuvo que ser internada  en un hospital de la Ciudad de México, donde su estado se reporta delicado.