Una vaca y un cadáver humano que estaban abiertos eran devorados por fauna silvestre afuera de una cueva y junto a un altar satánico.
El hallazgo fue reportado desde la llamada ‘Cueva del aire’, ubicada en la zona rústica de San Miguel Topilejo, alcaldía Tlalpan, cuando una llamada anónima avisó sobre el inusual hecho.
Autoridades llegaron y de inmediato aseguraron la zona donde animales comían los órganos del hombre de identidad desconocida, así como del bovino.
Asimismo, dentro de la cueva localizaron un altar que tenía velas, botellas y otros objetos sobre rocas, una de las cuales tenía escrito el número 666.
Posteriormente el cuerpo de la persona fue llevado al Semefo en calidad de desconocido, mientras que también retiraron los objetos encontrados y la vaca fue dejada a la intemperie.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México inició la indagatoria correspondiente.