Eduardo Miranda Olivares fue sentenciado a 13 años de prisión al ser encontrado culpable de trata de personas, en agravio de una mujer de nacionalidad nicaragüense.
La investigación de la Fiscalía mexiquense precisó que a partir del mes de marzo del año 2009 y hasta el año 2016, el ahora sentenciado obligó a la víctima a tener relaciones sexuales con hombres a cambio de dinero, esto en hoteles y bares ubicados en los municipios mexiquenses de Tultitlán, Tlalnepantla, Naucalpan, Atizapán de Zaragoza, e incluso en el estado de Hidalgo.
De la indagatoria se estableció que este individuo contactaba a los clientes y trasladaba a la víctima a distintos lugares para que llevara a cabo esta actividad. De lo anterior se beneficiaba Eduardo Miranda Olivares, puesto que el dinero obtenido por la víctima era cobrado por él. Además, la amenazaba con informar a las autoridades migratorias sobre su estancia ilegal en México.
En el año 2016 la persona afectada logró escapar, por ello estos hechos fueron denunciados ante el Agente del Ministerio Público, quien inició la indagatoria correspondiente y con las pruebas recabadas, fue solicitada a la Autoridad Judicial librar orden de aprehensión contra este individuo.