Fue al amanece del viernes cuando vecinos encontraron el cuerpo semidesnudo tirado e inconsciente entre sangre a un costado de la calle Francisco I. Madero y Nicolás Bravo, entre terrenos de sembradíos de maíz.
Al percatarse que no reaccionaba llamaron a la policía y servicios de emergencias; sin embargo, los paramédicos dedujeron que tenía algunas horas de haber fallecido, presentaba cortes en la mejilla derecha.
Personal de la Sedena y seguridad pública municipal colocaron un amplio acordonamiento para evitar que los pobladores pudieran acercarse hasta donde estaba el cadáver pese a que intentaban reconocerlo.
Personal de investigación del área de homicidios de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México se encargó de iniciar el expediente para dar con los responsables y conocer el móvil del crimen en los próximos días.