La madrugada de este miércoles en La Guadalupana, Ecatepec, dejó de oler a ponche para convertirse en una escena de caos; lo que era un tranquilo tianguis navideño terminó envuelto en gritos, golpes, disparos y acusaciones de abuso de autoridad que todavía resuenan entre los comerciantes.
Todo comenzó cuando policías municipales y elementos de la Fuerza de Tarea de la Marina irrumpieron de forma repentina en las calles del fraccionamiento, habían recibido el reporte de detonaciones cerca del bazar y, según su versión, al llegar encontraron a un grupo de personas alterando el orden.
Al ver a los uniformados, los sospechosos corrieron hacia el interior del tianguis, desatando un operativo que tomó por sorpresa a vendedores y visitantes.
En medio del laberinto de puestos navideños, la autoridad ubicó y detuvo a Aldo “N”, conocido como “El Balú”, a quien señalan como presunto integrante del grupo delictivo “La Chokiza”, considerado objetivo prioritario, durante la revisión, aseguraron que le encontraron un arma calibre .32.
Pero la historia no terminó ahí, apenas lo llevaban hacia a la patrulla, decenas de comerciantes rodearon a los elementos, exigían explicaciones, cuestionaban si existía una orden de aprehensión y defendían que “El Balú” era un compañero del bazar, no un criminal, la tensión se apoderó de la multitud.
Lo que siguió fueron minutos de desesperación, empujones, jaloneos, golpes, disparos al aire, vehículos dañados y un miedo que se extendió rápidamente entre los pasillos del tianguis, algunos vendedores intentaron grabar; otros sólo corrieron para ponerse a salvo.
En medio del descontrol, la policía metropolitana y la Marina lograron retirarse, llevando consigo al detenido rumbo a las instalaciones de la FEMDO, en la Ciudad de México.
Unas horas después, comerciantes aún con el susto transmitieron en vivo en Facebook lo ocurrido, entre voces temblorosas denunciaron abuso de autoridad, aseguraron que las detonaciones provinieron de los uniformados y que al menos 10 vendedores terminaron lesionados durante el enfrentamiento.
La indignación no quedó ahí, un comité del bazar se organizó y acudió a la fiscalía mexiquense para denunciar formalmente a los policías municipales y elementos navales que participaron en el operativo.
