ECATEPEC, Méx.- María Guadalupe atraviesa un gran sufrimiento desde hace 15 días por la extraña desaparición de su hija Arlet Samanta, que no llegó al kínder a recoger a su pequeño en la colonia Jardines de Morelos, por lo que pide intervención de la Policía Federal para que investiguen debido a que las autoridades municipales y estatales, con tanto  trámite burocrático, perdieron días  que eran claves para hallarla.

Enojada y con las lágrimas que brotaban por sus mejillas, María Guadalupe dio a conocer que  el día 25 de abril recibió una llamada de la profesora del preescolar que se ubica en la Sección Islas, donde le indicaron que pasará por  su nieto, porque su hija Arlet Samanta Olguín Hernández, no se había presentado por él, como lo hacía diariamente.

«Llegué a la escuela y me lleve a mi nieto, preocupada me trasladé a casa de mi hija, en la Sección Islas  y solo encontré a mis dos nietas comiendo un pedazo de tamal que mi hija les había comprado por la mañana, pero  mi angustia aumentó al llamarle a su celular que siempre me mandó al buzón», narró mostrando la imagen de su hija.

Explicó que los vecinos le comentaron que  se les hizo raro que las menores se encontraban afuera  con la puerta abierta y ellos indicaron a las pequeñas se metieran y cerraron la vivienda, ya que conocían a su hija y siempre que salía cerraba bien la casa.

Indicó que abrazó a sus tres nietos, uno de 5 años y las niñas de 3 y un año de edad, tomó una bolsa de ropa y se los llevó a su casa, los baño y les dio de comer, mientras su compadre y su hijo se trasladaron al área de la Célula de Búsqueda de la policía municipal, donde les dijeron que primero tenían que levantar la denuncia para que ellos pudieran actuar.

Ahí rastrearon la geo localización del teléfono que había sido ubicado en una comunidad de este mismo municipio, pero aseguró que no quisieron actuar a tiempo debido a que faltaba realizar los trámites como son la averiguación y el volante de Odisea, lo que retrasó la investigación un día.

A pesar del tiempo perdido, aun el celular de su hija a través de geo localización, seguía marcando el mismo lugar, sin embargo, insistió en que los de la célula solo los llevaron a volantear a la zona del Ehécatl, donde no era la ubicación correcta, porque recordó que era de donde había unas  las letras grandes,  hacia arriba, precisando que marcaba la comunidad de San Carlos.

“Fue el  viernes 27 de abri, que tuve que ir al Centro de Justicia de San Agustín para ver si ya estaba lista  la carpeta y de ahí recalcó la enviaron  a la Fiscalía, con una licenciada, quien fue a tomar fotos del domicilio  donde aparecía el rastreo  del celular y preguntó en la zona, que aseguró de nada han servido porque no hubo avances, ni  pistas de Arlet.

Gracias a la maestra Sol pude obtener las sábanas de llamadas, pero ahora ya se perdió la ubicación del móvil con estos trámites burocráticos hicieron perder tiempo importante para encontrar a mi hija, solo por echarse la bolita unos a los otros y por eso fui a la Policía Federal a solicitar su ayuda, pero ahora necesitan  el expediente que tienen en este municipio, para que no se dupliquen las carpetas y que las autoridades de aquí soliciten  su intervención, porque le dijeron ya es una investigación especial», señaló.

Sin dejar de derramar lágrimas por la impotencia que siente al no saber de su hija, solo sabe que a la hora que Arlet desapareció, se vio a una camioneta tipo Lobo, color negro, con las placas cubiertas, que podría ser donde se la llevaron.

Arlet, la joven de 22 años, madre de tres pequeños,  vestía la última vez que fue vista tenis blancos, pantalón de mezclilla, sudadera rosa con azul y una blusa roja, pero han transcurrido 15 días y no se sabe su paradero.

«Si, yo quiero que la Policía Federal interfiera en el caso, porque aquí no cuenta con el equipo necesario de investigación y aun sabiendo eso no han solicitan el apoyo a la corporación que si cuenta  con todo para poder hallar a mi Arlet, porque solo  perdieron el tiempo, que pudo ser importante para encontrarla y evitar que sea otra cifra más en la lista de asesinatos», comentó.

Triste, pero con un tono enérgico, lanzó un llamado al gobernador Alfredo del Mazo, quien dijo  prometió durante su campaña que trabajaría duro para  parar los crímenes y desapariciones de mujeres y ahora quiere que actúe, recalcando que no solo habla por ella, sino por todas las que están atravesando por su mismo problema, porque insistió «no es justo que exista tanta burocracia en este tipo de temas, donde deben  trabajar con eficacia,  sin poner trabas y actuar con rapidez», finalizó.