ECATEPEC, Méx.- 15 DE NOVIEMBRE DE 2016.- Por contar con una discapacidad, ya que nació sin el antebrazo izquierdo, Víctor Manuel Torres González es discriminado y no logra ser contratado en ninguna de las empresas donde se ha presentado a solicitar empleo, mismo que necesita para sacar adelante a su hija, de tan solo 10 años de edad, así como para ayudar a sus padres.
Torres González, de 35 años de edad, quien ahora vive solo en la colonia Real del Valle, del municipio de Acolman, explicó que debido a que sus padres no contaban con recursos económicos, tuvo que abandonar los estudios a nivel secundaria para dedicarse a trabajar.
Señaló que su discapacidad en el brazo izquierdo, la cual es de nacimiento, no le ha impedido salir adelante, al contrario, lo ha fortalecido para ser más fuerte ante los tropiezos de la vida y le ha enseñado a no detenerse ante los problemas económicos que ha enfrentado por falta de oportunidades de trabajo.
Recordó que cuando era niño pensaba en que sufriría de bullying por parte de sus compañeros de clase, pero afortunadamente nunca lo molestaron, sin embargo al llegar a la adolescencia sufrió algunos rechazos, principalmente de las jovencitas, quienes se alejaban de él al observar que le faltaba parte del brazo.
El joven dio a conocer que nunca se ha desmotivado y que siempre se ha considerado una persona normal, por lo que al principio trabajó de ayudante de albañil, así como de chofer de un bicitaxi, también fue vendedor de productos casa por casa y lavó trastes en una pizzería, en donde le pagaban un salario menor al de los demás empleados por su problema físico.
Víctor comentó que al cumplir los 24 años decidió a casarse por el civil, pero que al transcurrir los años se separó de su pareja con la que tuvo una hija de la que nunca se ha desentendido y a la cual visita cada quince días, ya que se encuentra viviendo con la abuela materna hasta Tizayuca, Hidalgo.
“He buscado trabajo en muchos lugares aquí en Ecatepec y hasta la Ciudad de México, pero las personas al verme solo me informan que no hay vacantes o que luego me llamarán, ni si quiera me entrevistan, siento discriminación porque a pesar de que solo cuento con una mano, puedo realizar las labores de una persona normal”, indicó.
Angustiado mencionó que ahora está decidido y empezará a estudiar para terminar la secundaria y la preparatoria, y presiente que aunque cuente con estudios siempre será rechazado por su condición.
“Quiero encontrar un trabajo estable donde pueda contar con todas las prestaciones, hacer antigüedad y poder comprar mi propia casa, así como tener servicio médico para ofrecerle un digno futuro a mi hija, quien cursa el quinto año de primaria, pero desgraciadamente no me contratan, me ven como si fuera un ser extraño, pero deberían de darme la oportunidad de demostrar que se trabajar”, dijo.
Por otra parte platicó que quiere seguir apoyando con el gasto a sus padres, como hasta la fecha lo ha realizado, quienes desde hace muchos años viven en la colonia Las Brisas, lugar donde fincaron su propio hogar y de los que nunca se desentenderá.
Víctor Manuel, el hombre que dijo que sabe conducir automóviles y quien actualmente se transporta en una motoneta, recalcó que le gusta mucho cocinar y que le hubiera gustado ser chef, pero por no tener dinero no ha podido estudiar esa carrera que es una de las más costosas.
Torres González, quien en sus ratos libres se dedica a leer y a dibujar, dijo que solo ha podido conseguir empleo de checador de la ruta de combis San Pedro Santa Clara, donde no percibe un salario y solo cuenta con la aportación voluntaria que le otorgan los choferes al pasar por la avenida Palomas, donde se encuentra parado, ratificando el horario en que circulan las unidades desde las 13:00 hasta las 21:00 horas.
“Por lo regular gano 150 pesos diarios y a mí solo me dejan estar de lunes a viernes, por lo que el dinero no me alcanza, ya que tengo que pagar renta, darle gasto a mis padres y además mandarle dinero a mi hija”, dijo preocupado Víctor.
Con una sonrisa en el rostro comentó que ha pensado en el futuro y formar un hogar, ya que su primera relación no funcionó y espera tener otros dos hijos, pero ante la falta de trabajo no sabe si realizará ese sueño.
Finalmente insistió en que aunque existe gente muy cruel que solo juzgan a las personas por su apariencia, no pierde las esperanzas de encontrar alguna empresa donde no lo discriminen y se solidaricen, para que le otorguen un empleo donde le den la oportunidad de demostrar su capacidad para trabajar.