NEZAHUALCÓYOTL.- Méx. 30 DE ENERO DE 2017.- Un hombre, vecino del municipio de Ciudad Neza denunció qué hace algunos días fue víctima de abuso de autoridad de parte de elementos de la Policía Ministerial quienes, tras un presunto cateo ingresaron a su domicilio para ofender a su familia y sustraer dinero en efectivo.

El hombre detalló que el pasado sábado 21 de enero, una célula de elementos de la Policía Ministerial al mando del Fiscal Regional de Nezahualcóyotl, llegaron a su domicilio de manera agresiva para realizar un cateo debido a que presuntamente dentro del domicilio se realizaban actividades como la venta de estupefacientes.

Según la denuncia del vecino de Nezahualcóyotl, los uniformados llegaron al domicilio y comenzaron a patear la puerta de acceso, por lo que tras solicitar información sobre qué es lo que sucedía estos contestaron de forma muy agresiva y comenzaron con las amenazas.

Luego de varios minutos de buscar supuestas drogas en el inmueble sin encontrar nada, quien se identificó como el Fiscal Mauricio Blancas Valerio, además del comandante Brandon Omar Soto Velasco, arrebataron del teléfono celular al denunciante ya que éste se encontraba grabando las acciones que como autoridad estaban cometiendo al interior del domicilio.

Tras minutos de malos tratos, sobre todo a la madre del denunciante quien tiene 74 años y que por momentos estuvo arrodillada en el piso, la familia comenzó a revisar el domicilio en búsqueda de alguna anomalía tras el cateo, qué a decir de los uniformados se estaba realizando en el domicilio por venta de drogas cómo marihuana y cocaína, mismas que no pudieron ser localizadas, sin embargo 35 mil pesos en efectivo producto de la venta de un vehículo habían desaparecido.

Un par de días después la familia acudió ante la Visitaduría General de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México para interponer la queja ante presuntas violaciones de Derechos Humanos atribuidos a servidores públicos de la Fiscalía General quienes tomaron pleno conocimiento de los hechos y lo asentaron en un oficio fechado el 23 de enero en Ciudad Nezahualcóyotl, en donde consta todas y cada una de las presuntas violaciones a los Derechos Humanos a las cuales la supuesta orden de cateo encabezada por Mauricio Blancas Valerio y el comandante Brandon Óscar Soto Velasco realizaron en agravio de la familia.