La pesadilla no termina; han pasado más de dos días desde que las lluvias provocaron severas inundaciones en el municipio y fue hasta hoy que las autoridades comenzaron con las labores de limpieza en los hogares afectados, en Neza.
En la colonia Ampliación Vicente Villada las calles siguen convertidas en auténticos ríos de aguas negras; el hedor, el lodo y el abandono predominan.
Vecinos denuncian que el apoyo ha sido lento e insuficiente, mientras tratan de rescatar lo poco que les quedó dentro de sus casas.
“Todo se nos echó a perder, el agua nos llegó hasta las rodillas y nadie vino a ayudarnos, apenas hoy están empezando a limpiar”, comentó una habitante de la zona.
Familias enteras pasan la noche entre humedad, pérdidas materiales y temor a que vuelva a llover, la desesperación crece y la respuesta oficial apenas comienza.
