TEPELIXPA, Méx.- Una confusión estuvo a punto de terminar en tragedia, ya que pobladores de la comunidad de San Esteban Cuecuecuautitla estuvieron a punto de linchar a dos hombres que habían sido acusados de intento de violación por una mujer.
La noche del tres de noviembre, una pequeña turba de pobladores retuvieron y golpearon a dos jóvenes que fueron acusados falsamente por una mujer de intentar violarla.
Todo inició cuando una joven identificada como Adriana Martínez Flores, de 24 años de edad, alertó a los vecinos gritando en la calle que la querían violar. Al escucharla, la gente salió de sus casas para auxiliar a la muchacha, quien señaló como sus agresores a dos sujetos que estaban ingiriendo bebidas embriagantes en el parque General Emiliano Zapata, informaron policías estatales.
Varias personas, en su mayoría hombres, se dirigieron al lugar ubicado a unos 800 metros de la iglesia de San Esteban Protomártir, para detener y agredir a los jóvenes de nombres José Antonio y Jonatan Iván, quienes supuestamente habían intentado violar a la mujer, quien insistía en señalarlos como sus agresores.
Los pobladores los sujetaron para impedir que se fueran y los comenzaron a golpear, pues querían tomar venganza por sus propias manos. Así pasaron alrededor de 10 minutos, tiempo durante el cual más gente se reunió alrededor de los jóvenes, ya que tocaron las campanas de la iglesia para llamar a la población.
Las agresiones y la intención de lincharlos, obligó a elementos seguridad pública de Tepetlixpa y a oficiales de la Comisión Estatal de Seguridad a llegar al lugar para apoyar a los jóvenes, quienes negaban todo el tiempo que querían abusar de la mujer.
Después de haberlos golpeado fuertemente, los muchachos fueron rescatados de manos de los vecinos, pero durante el forcejeo la ofendida reconoció conocer a los jóvenes con quienes había estado consumiendo bebidas alcohólicas durante la tarde en el parque, pero al calor de las copas los desinhibió y comenzaron a tocarla de manera irrespetuosa, situación que la incomodó.
Esta versión aclaró los hechos y los ánimos se calmaron, aunque los dos jóvenes fueron trasladados a la Fiscalía Regional donde Jonatan Iván quedó detenido por el delito de ultrajes, mientras que el otro muchacho quedó en libertad.