TENANCINGO.- Méx. 6 DE FEBRERO DE 2017.- Elementos de la Policía Ministerial del Estado de México y de Reynosa Tamaulipas, detuvieron a un hombre que fuera elemento de la Comisión Estatal de Seguridad, identificado como Alonso Herrera Jardón, de 30 años, quien contaba con una orden de aprehensión por homicidio doloso cometido en agravio de Lilia Ortega Serrano de 37 años, quién era esposa del Fiscal de Homicidios del Estado de México.
Según información revelada por fuentes cercanas a la investigación, se había girado una orden de aprehensión en contra de Herrera Jardón luego de que el 24 de enero asesinara a Lilia Ortega, con quien al parecer sostenía una relación amorosa, luego de que ésta le dijera que era la última vez en que podían verse, por lo que tras tener un encuentro íntimo el ex policía del Estado de México asesinó a la mujer.
Para ocultar toda evidencia sobre su crimen, el hombre depositó el cuerpo de la esposa del Fiscal de Homicidios del Estado de México en un tinaco de plástico, el cual rellenó totalmente con concreto con lo que esperaba que cualquier indicio sobre el asesinato de su amante, quedara oculto sin que nadie supiera sobre el paradero de la mujer.
Un par de días después el 26 de enero, familiares del Lilia Ortega la reportaron como desaparecida, lo que motivó que policías investigadores entrevistarán varias veces al exagente Alonso Herrera quien en todo momento negó haber estado con la mujer con quién toda la corporación sabía que sostenía una relación extramarital.
Herrera Jardón, pensaba que había cometido el crimen perfecto por lo que decidió cambiar su lugar de residencia a Reynosa Tamaulipas, en donde habría comenzado una nueva vida y acababa de iniciar labores como obrero en una maquiladora, sin embargo el propio Fiscal de Homicidios y ahora viudo de la asesinada, comenzó una investigación exhaustiva sobre lo que habría sucedido aquella última noche que estuvo con vida a su mujer.
Al interior del domicilio de Herrera Jardón, comenzaron a buscar todos y cada uno de los indicios, encontrando algunas pertenencias de Lilia por lo que las sospechas de que habría sido asesinada en el lugar se incrementaron, tras revisar el tinaco que se encontraba totalmente lleno de cemento se solicitó a personal especializado destruir el contenedor de plástico dónde encontraron el cadáver de la mujer por lo que de inmediato fue girada la orden de aprehensión en contra del ex uniformado del Estado de México, quién continuaba con su nueva vida en Reynosa Tamaulipas.
Luego de solicitar un cruce de información con los elementos ministeriales de Reynosa, los uniformados del Estado de México se trasladaron a la ciudad fronteriza donde ubicaron al expolicía, a quién se le informó el motivo de su detención y su posterior traslado a un centro penitenciario ubicado en la capital mexiquense.