ATROZ: A Carlos lo citaron para un trabajo y desapareció, su familia vive un infierno
POR: Beda Peñaloza / 23 de noviembre de 2021
Carlos Alberto, vecino de Ecatepec, misteriosamente desapareció junto a un verificentro en Tlalnepantla lugar donde lo citaron para realizar un trabajo; su familia lleva más de dos años buscándolo.
Desde el 6 de mayo del año 2019, una familia vive un viacrucis luego de Carlos Alberto Sánchez Toscano, ya no regresó a su casa ubicada en los Héroes Quinta Sección en Ecatepec, porque desapareció.
Karla, su hermana, relató que cerca de las 18:30 de la tarde su hermano Carlos quien se dedica a realizar trabajos de autobutique, salió rumbo al verificentro ubicado a un costado de la autopista México-Pachuca a la altura de San Juanico, municipio de Tlalnepantla, lugar donde lo citaron porque instalaría un GPS a un automóvil.
Recordó que alrededor de las 19:00 horas, fue el último contacto que tuvieron vía telefónica con Carlos, quien le comentó a su madre, que ya se encontraba en el lugar donde lo citaron las personas para el trabajo, pero que esperaría porque todavía no llegaban.
Sin embargo ya no volvieron a tener noticias del joven de 22 años que vestía tenis de gamuza color aceituna con negro, camisa vino, suéter negro, porque ya fue imposible contactarlo, porque desconocían quien lo había contestado para en trabajo y a su móvil que ya estaba apagado.
Por lo que, se trasladaron al lugar donde fue citado, donde iniciaron la búsqueda sin tener éxito.
Se preocuparon porque amigos, vecinos y familiares tampoco tenían noticias del paradero del joven que como señas particulares tiene tatuajes en los brazos así como una cicatriz por cirugía de apéndice.
De igual manera recorrieron, Semefos, hospitales, cárceles con la esperanza de encontrar al joven trabajador, sin embargo al no lograr localizarlo, se trasladaron al Centro de Justicia de Tlalnepantla para iniciar la denuncia por la desaparición.
Desde ese día, dijo Karla, la vida de toda la familia, que siguen la búsqueda de su hermano al que aman, cambió.
Con el pasó del tiempo, ante la falta de pistas de su paradero, la Fiscalía que no tiene avances en la investigación, emitió un boletín de recompensa de hasta 300 mil pesos por su localización.
«No buscamos culpables, queremos a mi hermano», comentó Karla que aseguró no dejarán de buscar a Carlos quien desapareció sin dejar rastro hace dos años y medio.
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