«No se mata la verdad, asesinando periodistas», replicaron comunicadores de diversos medios para pedir un alto al asesinato de colegas que han sido violentados, como parte de la movilización nacional.

La libertad informativa se encuentra amenazada cuando apenas comienza el 2022, con tres casos que han encendido las alarmas para el gremio que pide mayor seguridad para desempeñas su labor.

La concentración de esta tarde es para hacer un llamado urgente a autoridades para frenar la violencia contra personas que ejercen la labor de informar y que muchas veces resultan incómodos para los gobiernos.

En la movilización se utilizaron carteles, veladoras y fotografías de comunicadores que han sido privados de la vida, también dejaron sus cámaras frente a palacio de gobierno en señal de duelo por las agresiones.

El caso de María de Lourdes Maldonado López, se suma al de Margarito Martínez y José Luis Gamboa que fueron ultimados en este primer mes del año, sus muertes siguen impunes bajo una carpeta de investigación.

La protesta de repudio se realizó en varias ciudades del país, todos con el mismo objetivo pedir garantías para el ejercicio periodístico, México es uno de los lugares más peligrosos en el mundo para ese trabajo.