«La arrastró varios metros, una de sus piernas quedó mal», dice un policía mientras levantan el cuerpo de Marlene, luego de ser atropellada cuando iba acompañada de su mamá en la Central de Abasto, en Toluca.
Los curiosos, comerciantes, diableros o compradores se acercaban a la cinta amarilla que impedía el paso de los vehículos, una marca de un neumático de una unidad pesada quedó pintada en la cinta asfáltica.
La mujer de 21 años murió casi al instante luego de ser alcanzada por un automóvil en la avenida Paseo del Abasto y Arratia, el martes, al momento que la gente llegaba a realizar compras en San José Guadalupe Otzacatipan.
Al arribo de una ambulancia de Protección Civil municipal, los paramédicos dedujeron que no había nada que hacer por la joven, al cuerpo lo cubrieron con una cobija de color rojo, la madre lloraba a un costado del cadáver.
No hubo ningún detenido, incluso todavía las autoridades checaban las cámaras del circuito cerrado para determinar si se trató de una unidad del transporte público u otro camión de carga que pasaba por el lugar de la tragedia.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México a través del área de hechos de abrió una carpeta de investigación para determinar con los peritajes y videos la forma en que se registró el siniestro vial.