“¡Se le hará justicia, así será, esto no se quedará así!”, fue la sentencia de familiares y amigos de la señora Brígida, quien murió atropellada tras ser embestida por un automovilista, junto con su hijo Samuel, en la colonia Vallejo, alcaldía Gustavo A. Madero.
El sábado, 11 de enero, la señora Brígida se dirigía a poner su puesto de ropa, como lo había hecho desde hace 42 años, a la calle Francisco Tamagno, en el trayecto encontró a Samuel, su hijo de 39 años, y mientras se saludaban ocurrió el accidente.
Eran apenas las 7:47 de la mañana, ambos estaban al exterior de los “Acumuladores Martínez”, en el Eje 3 Norte, Robles Domínguez, y Bizet, cuando el vehículo Honda chocó con el negocio y después los embistió. Ella murió.
Samuel fue trasladado grave al hospital de Ticomán, necesita una cirugía y su estado de salud aún es delicado, por lo que aún no le informan de la muerte de su madre.
“Él era el que más estaba con mi mamá, es que vivían cerca, se procuraban más y hoy él ni sabe que murió, pero es mejor porque está delicado y enterarse de eso agravaría su estado”, explicó la señora Blanca, hermana de Samuel e hija de Brígida.
En medio de la impotencia y el coraje, por qué el responsable no se ha encargado de los gastos funerarios de la señora Brígida ni de los gastos médicos de Samuel y menos de la reparación del negocio, despidieron a “mamá Bicho”, como le llamaban con cariño.
“Mi mamá siempre fue muy activa, trabajadora, siempre andaba movida y era muy alegre, así quiero recordarla”, agregó la mujer.
La señora de 70 años deja a tres hijos, a cuatro nietos y dos bisnietas, quienes estuvieron despidiéndola y abrazados a su fotografía.
“Tenemos impotencia, mi mamá nos había dicho que quería que la lleváramos a Cuautla de Jiménez, en Oaxaca, quería que la enterráramos con su papá, de allá son, pero ya no se pudo por esto”, agregaron familiares.
Sus familiares recuerdan a Brígida alegre, aseguran que le gustaba la música de Conjunto Primavera y Los Temerarios, una enfermedad en los pulmones impidió que la llevaran a un concierto de sus grupos favoritos.
“Vuela alto serás nuestra estrella Mamá Bicho”, es una de las leyendas que sus nietas escribieron en la cruz de madera que adorna su tumba.
Los familiares apoyó de las autoridades para que Christian N, quien se presume conducía alcoholizado, ya que hallaron latas de cerveza en el auto, pague por la muerte de la señora Brígida, así como los gastos médicos de Samuel y la reparación del negocio.